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La esquizofrenia es una enfermedad mental crónica y especialmente grave.. Se clasifica como una psicosis, acompañada de obsesiones y que provoca una "pérdida de contacto con la realidad".
Este trastorno mental es relativamente frecuente, afecta a 600.000 personas en Francia y aproximadamente al 1% de la población mundial[1].
La esquizofrenia es una patología compleja con una variedad de síntomas que incluyen, esquemáticamente, una imagen perturbada de la realidad, con alteraciones de los procesos sensoriales (alucinaciones) y pensamientos delirantes; la afección suele ir acompañada de dificultades para planificar acciones orientadas a objetivos y, por último, incluye el retraimiento relacional.
> Los especialistas clasifican los síntomas en 3 grupos:
Estos son los más impresionantes. Incluyen pensamientos delirantes y excéntricos, sensación de persecución o paranoia y alucinaciones de los sentidos, siendo las más comunes las alucinaciones auditivas en forma de voces imaginarias[2].
El sujeto se empobrece emocionalmente y se retira de la vida social: se comunica menos, tiene una fuerza de voluntad limitada y muestra una emotividad reducida[3].
Incluye una pérdida de pensamiento coherente, con dificultades para comprender o hacerse comprender.
El sujeto tiene problemas de atención(dificultad para concentrarse) y de memoria: pueden ser tan graves que dificulten o impidan la realización de tareas cotidianas sencillas (trabajo, compras).
> La esquizofrenia no es una enfermedad de aparición súbita. Comienza con síntomas leves que a menudo no son exclusivos.
Mientras que los síntomas positivos (o en exceso) facilitarán el diagnóstico, los síntomas deficientes pueden interpretarse como depresión, lo que puede retrasar el diagnóstico durante varios años[3].
La hospitalización suele ser necesaria para el primer episodio (delirios).
Si no se trata, la esquizofrenia puede provocar depresión, ansiedad, fobias, conflictos familiares, abuso de drogas y alcohol, aislamiento social e intentos de suicidio..[4]
Las personas con esquizofrenia tienen un alto riesgo de suicidio.
No existe una única causa conocida de la esquizofrenia.. Como muchas otras enfermedades mentales, parece deberse a una combinación de factores.
- una explicación biológica. La actividad alterada de neurotransmisores como la dopamina y la serotonina.
- Una explicación ambiental, con un papel establecido para el estrés y el cannabis (especialmente en adolescentes).
- una explicación genética: cuando un familiar padece esquizofrenia, el riesgo de que otro miembro de la familia contraiga la enfermedad es 10 veces mayor que en una familia sin la enfermedad[5].
La medicación, principalmente los neurolépticos, pueden aliviar los síntomas y reducir las tasas de recaída, pero no la "curan". A menudo se añade un enfoque de terapia cognitivo-conductual.
El cannabidiol, o CBD para abreviar, es una molécula derivada de la flor del cáñamo (cannaibis sativa L.), igual que el THC. A diferencia del THC, no tiene efectos psicotrópicos.
Un estudio de 2019 dedicado al CBD como posible tratamiento de la esquizofrenia[6] presenta el tema del siguiente modo:
El descubrimiento de la dopamina en los años 50 revolucionó el tratamiento de los trastornos psicóticos, incluida la esquizofrenia. Los neurolépticos, que actúan sobre los niveles de dopamina, siguen siendo la base del tratamiento de la esquizofrenia. Sin embargo, una proporción significativa de pacientes no responde a los antipsicóticos tradicionales, o lo hace de forma incompleta. Además, la mayoría de los antipsicóticos actuales sólo actúan sobre los llamados síntomas "positivos" de la esquizofrenia, con escaso efecto sobre los síntomas negativos o cognitivos.
Por último, los antipsicóticos dopaminérgicos también se asocian a una serie de efectos secundarios, algunos de los cuales pueden ser graves.
Un estudio clínico realizado en 2012[7] incluyó un estudio doble ciego en 39 pacientes con trastornos psicóticos graves. Los pacientes fueron tratados con CBD o amisulprida 800 mg durante cuatro semanas.
La amisulprida es un fármaco neuroléptico (vendido bajo las marcas Solian, Deniban o Amitrex).
Ambos tratamientos, CBD o este neuroléptico, mostraron mejoría clínica.
También en este estudio, los investigadores midieron los niveles de anandamida en el suero sanguíneo antes y después del tratamiento con CBD o amisulprida y su relación con los síntomas psicóticos.
La anandamida es un neurotransmisor que interviene en la regulación del estado de ánimo, la memoria, el apetito, el dolor, la cognición y las emociones.
En comparación con el tratamiento con amisulprida, el CBD mostró un aumento significativo de los niveles de anandamida y esto se asoció a una mejora de los síntomas psicóticos.
Estos resultados sugieren que los niveles de anandamida podrían servir como posible biomarcador de la eficacia del tratamiento con CBD.
Como se mencionó en la introducción, el uso de fármacos antipsicóticos se asocia a frecuentes efectos secundarios*[8], que influyen considerablemente en el cumplimiento a largo plazo.
Efectos secundarios de la amilsulprida según Vidal :
- En más del 10% de los casos: rigidez muscular, temblores, movimientos anormales, hipersalivación.
- En 1 a 10% de los casos: insomnio, ansiedad, agitación, aumento de peso, problemas sexuales.
Según el estudio clínico de 2012 ya mencionado, el tratamiento con CBD se asoció a un menor riesgo de síntomas extrapiramidales*, un menor aumento de peso y un menor incremento de la prolactina, que es un factor predictivo de la disfunción sexual.
* Los efectos secundarios son reversibles cuando se interrumpe el tratamiento.
* Movimientos lentos, rigidez, temblores en reposo.
Un estudio holandés publicado en julio de 2019[9] llevó a cabo un ensayo clínico aleatorizado controlado con placebo de seis semanas para evaluar el efecto del tratamiento con CBD (1000 mg/día), además de su tratamiento habitual con fármacos antipsicóticos.
Esta prueba a gran escala se realizó en 88 pacientes ambulatorios (hospital de día) con esquizofrenia "moderada". Al cabo de seis semanas, los síntomas positivos (principalmente alucinaciones) y la impresión clínica general mejoraron significativamente en el grupo tratado con CBD en comparación con el placebo. Así pues, el estudio sugiere que el tratamiento con CBD para la esquizofrenia es beneficioso y podría llegar a ser tan eficaz como los fármacos antipsicóticos.
" El CBD puede normalizar los déficits afectivos y cognitivos (desorganización) asociados a la esquizofrenia ": estudio de febrero de 2017[10].
Por último, el reciente estudio de 2019 concluye que en ambos casos: "El CBD, como terapia sola o como complemento de los fármacos antipsicóticos habituales, mejoró los síntomas en pacientes con esquizofrenia, con efectos especialmente prometedores en las primeras fases de la enfermedad".
Hay dos métodos especialmente eficaces para tomar cannabidiol: vaporizar flores y aceite de CBD. Con el aceite de CBD, basta con colocar unas gotas bajo la lengua durante algo más de treinta segundos. Aunque el cannabidiol no tiene efectos secundarios, y dado que cada persona reacciona de forma diferente a los cannabinoides, es aconsejable empezar con la dosis más baja y luego aumentar gradualmente la dosis hasta lograr el alivio.
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