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El mundo del cannabis legal está cambiando rápidamente. Después del Rosin y el Ice-O-Lator, he aquí el nuevo proceso de extracción que es noticia en estos momentos: el tamizado estático.
Esta extracción no utiliza agua helada, presión ni disolventes para extraer los cannabinoides de las flores, ¡sino electricidad estática! Y lo mejor es que el proceso es 100% natural, tan sencillo que incluso puedes hacerlo en casa.
¿Quieres saber cómo funciona y cómo hacerlo tú mismo? Este es el lugar donde descubrirlo.
El tamizado estático en seco es el nombre de un método de extracción. Es una técnica utilizada para cosechar los cannabinoides presentes en las flores de cannabis y cáñamo. Esta técnica natural, sin aditivos de ningún tipo, consiste en frotar suavemente las flores tamizadas entre dos materiales que generan electricidad estática.
En sólo unos minutos, los tricomas cargados de cannabinoides se separan de los restos vegetales: ¡el resultado es un polvo dorado, potente y perfectamente puro!
El hachís seco estático está acaparando cada vez más titulares estos días. Su pureza y alta calidad lo convierten en uno de los productos más solicitados por los amantes del hachís de primera calidad. Pero la técnica en sí no es precisamente nueva, ¡y el principio de utilizar electricidad estática se remonta a miles de años atrás!
El cernido en seco, tal y como lo conocemos hoy, fue desarrollado en la década de 1980 por un tal Skunkman Sam. A este criador californiano se le ocurrió la idea del tamizado en seco durante un viaje a África Occidental. Durante este viaje, pudo observar una técnica de extracción ancestral: el charas. Consiste en frotar las flores de cannabis entre las manos para recoger los tricomas, que se adhieren a la piel como resultado de la electricidad estática.
Tras darse cuenta de ello, Skunkman Sam regresó a California y empezó a perfeccionar la técnica.
El tamizado en seco es una técnica basada en el tamizado mecánico. Las flores de CBD se pasan por tamices cada vez más finos para separar los tricomas del material vegetal. El tamizado estático es bastante similar, pero con el añadido de una fase de "limpieza" mediante electricidad estática.
Como resultado, el tamizado estático es mucho más puro, potente y aromático. Pero se obtiene mucha menos sustancia que con el clásico tamizado en seco.
En última instancia, el tamizado estático se utiliza para producir una resina muy pura y de gran calidad, pero su rendimiento es bastante bajo. El tamizado en seco, en cambio, produce un resultado de calidad ligeramente inferior, pero en cantidades mucho mayores.

El tamizado estático tiene una serie de ventajas que lo convierten en una de las técnicas más populares entre los entendidos.
A diferencia de muchas otras técnicas que utilizan disolventes químicos, como el etanol, o no químicos, como el agua, el tamizado estático utiliza un proceso 100% natural, sin aditivos de ningún tipo. Por lo tanto, el producto es totalmente puro, siempre que las flores se hayan cultivado de forma natural.
La pureza del producto también garantiza una alta concentración de cannabinoides. Un alto porcentaje de CBD pero también de cannabinoides secundarios, lo que aumenta considerablemente la potencia. De hecho, cuando se toman juntos, los tricomas crean un efecto séquito, una sinergia que multiplica la potencia y los efectos de cada cannabinoide presente.
Los tricomas no sólo contienen cannabinoides, sino también terpenos y flavonoides. Éstos son los que dan a las flores su sabor característico, que varía de una variedad a otra. La extracción por tamizado estático produce un concentrado de potencia y sabor.
No existe un método único para elaborar el tamiz seco. Cada laboratorio y productor tiene sus pequeñas técnicas y trucos. Algunos trabajan en una atmósfera fría, utilizando flores congeladas, otros utilizan máquinas específicas para aumentar la velocidad de extracción... Sin embargo, las etapas del proceso son más o menos las mismas siempre:

Para empezar, tomamos nuestras flores y las trituramos para obtener una materia prima más fácil de utilizar. Esto también acelera el proceso de extracción, ya que cuanto más fina sea la materia prima, más fácil será cosechar los tricomas.
A continuación, pasamos las flores molidas por un primer tamiz, como haríamos para un tamizado en seco. Cogemos un tamiz bastante grande, de entre 130 y 170 micras, y frotamos las flores sobre él para eliminar la mayor cantidad posible de materia vegetal. Si desea que la siguiente etapa sea aún más rápida, puede pasar las flores tamizadas por tamices aún más finos.

El polvo se frota entre dos superficies, creando electricidad estática. Los fabricantes suelen utilizar superficies de plástico o cristal.
Pero si quieres hacerlo en casa, puedes utilizar film transparente y guantes de plástico. Frota el polen tamizado sobre una superficie cubierta de film transparente con los guantes para recoger los tricomas. A continuación, simplemente cepilla los tricomas de los guantes y ya está.

Al final del proceso, se obtiene un polvo muy fino, una especie de polen de CBD muy puro. Puedes conservarlo así y consumirlo como polen de CBD. Pero para obtener una resina en el verdadero sentido de la palabra, también puedes prensarla en caliente o en frío.
Static Sift es un ejemplo perfecto de cómo el mundo del cannabis legal sigue evolucionando e innovando. Inspirado en técnicas milenarias pero actualizado con procesos modernos, ofrece una alternativa natural, sencilla y eficaz para obtener un producto de gran pureza.
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