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Aventureros y amantes de los efectos psicoactivos, hemos descubierto un nuevo continente para vosotros: Muscimole.
A diferencia de la mayoría de nuestros artículos anteriores, aquí no se trata deun nuevo cannabinoide. El muscimole es un alcaloide psicoactivo y alucinógeno sintetizado por las setas de la familia de las Amanitas.
¿Quieres saber más sobre ella, sus efectos y sus aplicaciones médicas? Sigue la guía, ¡está más abajo!
Como hemos dicho, el muscimole es un alcaloide, una familia muy amplia de moléculas de origen vegetal, diferente de los cannabinoides. Fue el descubrimiento de estas moléculas lo que condujo al desarrollo de la industria farmacéutica a principios del siglo XX. Incluyen la mayoría de las moléculas naturales terminadas en "-ina", como la nicotina, la cafeína, la morfina, etc.
En la naturaleza hay un centenar de alcaloides, entre ellos el muscimole, que producen exclusivamente las amanitas, como la Amanita muscaria: la mosca agárica. Esta especie se encuentra en toda Europa, pero también en Brasil, Sudáfrica, América del Norte y Asia Central. El agárico de mosca se reconoce por su color rojo brillante con motas blancas.
Según algunos historiadores, este hongo fue uno de los primeros alucinógenos utilizados por la humanidad. De hecho, algunos textos griegos afirman que se utilizaba en las ceremonias de los primeros cultos dedicados a Dionisio. También se encuentran rastros del consumo de este hongo con fines médicos, recreativos o religiosos en las prácticas chamánicas primitivas de todo el mundo.
Con el desarrollo de productos recreativos como el CBD, sus diversos derivados y nuevos productos como el sniffy, ciertas moléculas un tanto olvidadas vuelven a resurgir. Es el caso del muscimol. Ya en 2018 se podía encontrar esta molécula en gominolas, caramelos de gelatina que también vienen con THC y CBD o derivados del CBD.
Hoy en día, el muscimole está empezando a ganar adeptos y puede encontrarse en una gran variedad de formas:
El muscimole actúa principalmente como agonista de los receptores GABAA. Al unirse a estos receptores, la molécula inhibe la actividad neuronal, lo que provoca efectos sedantes, relajantes y, en ocasiones, alucinógenos.
Por lo tanto, el muscimole produce efectos psicoactivos y psicotrópicos definidos, e incluso puede producir efectos alucinógenos cuando se consume en grandes cantidades. Pero desaconsejamos encarecidamente su consumo, ya que estos efectos podrían ir acompañados de efectos secundarios igualmente potentes.
Al igual que ocurre con los cannabinoides, los efectos del muscimole varían en función de la dosis consumida, la sensibilidad individual y el método de consumo. Los efectos más frecuentemente descritos por los consumidores son :
Pero un consumo excesivo también puede provocar somnolencia, náuseas, alucinaciones y sensación de confusión y desorientación, por lo que no es algo que deba tomarse a la ligera.
Aunque conocido desde hace siglos, el muscimole se ha redescubierto hace relativamente poco, pero ya ha sido objeto de varios estudios interesantes:
El primer estudio científico sobre este tema se remonta a 1964. Fue realizado por cuatro médicos de la Universidad de Investigación Médica de Tokio. Este estudio pionero fue el primero en identificar y aislar los agentes activos del agárico de mosca, incluido el muscimole. De este modo, allanó el camino para todos los estudios posteriores.
En un estudio realizado en 2002, un grupo de investigadores se propuso explorar los posibles efectos ansiolíticos del muscimol mediante pruebas con animales y ensayos clínicos preliminares. Y, aunque era necesario seguir investigando, los investigadores llegaron a la conclusión de que, al activar los receptores GABA, el muscimol podría ofrecer ventajas en el tratamiento de los síntomas de ansiedad.
En un artículo publicado en 2015 en Sleep Medicine reviews, un grupo de investigadores observó que la sedación inducida por el muscimole tenía el efecto de prolongar el sueño profundo en los pacientes. Y aunque aún se necesitan más estudios para evaluar la seguridad y eficacia de esta molécula, parece que podría resultar beneficiosa en el tratamiento del insomnio.
Mientras que algunos estudios muestran los efectos beneficiosos del muscimole, otros señalan sus efectos negativos. Es el caso de dos estudios: el primero, publicado en 1993, demostró que el consumo de muscimole podía alterar la consolidación de la memoria a largo plazo y el aprendizaje al perturbar la actividad neuronal en las regiones cerebrales clave implicadas en estos procesos, como el hipocampo.
El segundo estudio, publicado en 2007, demostró que la administración de muscimole a los animales complicaba su orientación y localización en un entorno complejo. Este estudio pudo así evaluar el papel de los receptores GABAA en este tipo de ejercicio.
Un reciente estudio publicado en 2010 examinó el potencial terapéutico del muscimole en el tratamiento de la epilepsia. Los resultados obtenidos en modelos preclínicos muestran que el muscimole puede reducir la frecuencia y gravedad de los ataques epilépticos al reforzar la inhibición GABAérgica en el cerebro. Por tanto, el muscimole podría convertirse en un serio candidato para el tratamiento de los trastornos epilépticos, pero como siempre, es necesario seguir investigando.
En Francia, como en la mayoría de los países de la Unión Europea, el consumo de muscimole está regulado. Por ejemplo, está prohibido consumir agárico de mosca. Pero la molécula de muscimole por sí sola puede consumirse. Por lo tanto, los productos en forma de vape pens, gominolas y productos a base de CBD son totalmente legales.
Sin embargo, está prohibido para los niños, las mujeres embarazadas o en período de lactancia y antes de conducir. Los productos a base de muscimole son muy potentes, por lo que le aconsejamos que los utilice con la máxima precaución y evite consumirlos en exceso.